jueves, 18 de octubre de 2012

Confesiones

Es difícil empezar una entrada, más cuando tienes tantas cosas en la cabeza. El problema mío nunca ha sido
la falta de ideas sino la organización de las mismas, tal vez es por eso que mi blog se llama La Farfulla porque mis ideas surgen y se plasman en un papel atropelladamente sin dejar que las palabras fluyan y se vean al final estéticas, tal vez por eso también tengo temor de escribir de nuevo.

Ahora mismo tengo un arranque de sinceridad y les diré lo que me sucede: todos los días, desde hace muchos años amanezco con palabras bellísimas en la cabeza (a mi parecer) al inicio ingenua puberta creí que escribiéndolas en un papel se verían tal cual las pensé, para mi sorpresa cada que decidía anotarlas se escondían, se intimidaban y me huían como animales escurridizos, lo peor del asunto no es que se escondieran del papel sino que también se iban de mi mente y ya no volvían, eso me llenaba de frustración porque me separaba totalmente de ellas, no podía saber en que acababa su historia. Opte también ilusamente  por usar un grabador de voz, creyéndome más astuta, dije esta vez seré rápida y no se me podrán escapar, esta de más decir que fue inútil, siempre eran más veloces que yo.

Es por eso que ahora tengo poesía o sabe que invento mal hecho todo el tiempo en mi cabeza, me deleito leyéndome por dentro, a veces termino a veces no, también hay días en que las palabras en mi cabeza son tan armoniosas y perfectas y en conjunto forman algo tan satisfactorio para mi, que me brotan las lagrimas, debo aclarar que no a cantaros, son lagrimas discretas y pequeñas cómo de felicidad.

Mi prosa se va tranquila sabiendo que se confeso conmigo de principio a fin y que a mi me dejo en un estado de paz. Ese es el acuerdo, que nuestra unión y comunión sean secretas, que no las pueda ver, gozar, ignorar, recitar nadie más. Son celosas de mi y yo quisiera no serlo de ellas, me gustaría que salieran y conocieran del mundo que vieran lo precioso que puede llegar a ser que otros se identifiquen con ellas, que son bonitas e interesantes con todo y sus errores gramaticales, que entendieran que muchos van a rechazarlas pero que ellos las hará pulirse y crecer.





Debo irme ya se dieron cuenta que estoy hablando de ellas, empiezan a esconderse.

martes, 2 de octubre de 2012

El espejo de piedra

José Carlos Becerra Ramos



Detrás de la iglesia de Santiago-Tlatelolco,
los cuchillos de jade hallaron su visaje ceremonial en boca de las ametralladoras.
Detrás de la iglesia de Santiago-Tlatelolco, Nuño de Guzmán oró ante Huitzipochtli
y le ofreció el sacrificio.

Detrás de la iglesia de Santiago-Tlatelolco, descubrieron aterrados que otra vez existía ese país,
aquel que ellos creyeron sepultado
bajo el jade y las plumas y los estípites y los palacios de Adamo Boari y los desayunos en Sanborn’s,
de su oportuna y mestiza retórica.
Detrás de la iglesia de Santiago-Tlatelolco, treinta años de paz más otros treinta años de paz,
más todo el acero y el cemento empleados en construir la escenografía para las fiestas del fantasmagórico país,
más todos los discursos
salieron por boca de las ametralladoras.

Lava extendiéndose para borrar lo que iba tocando, lo que iba haciendo suyo,
para traerlo a la piedra del ídolo nuevamente.
¿Pero lo trajo de nuevo a la piedra del ídolo?
¿Pero tantos y tantos muertos por la lava de otros treinta años de paz,
terminarán en la paz digestiva de Huitzilopochtli?
Se llevaron los muertos quién sabe adónde.

Llenaron de estudiantes las cárceles de la ciudad.
Pero al jade y a las plumas y al estofado de los estítipes y a los nuevos palacios que ya no construyó Boari, y a los desayunos en Sanborn’s,
se les rompió por fin el discurso.
Y cuando intenten recoger esos fragmentos de ruido para contemplarse,
encontrarán en ellos solamente
a los muertos hablándoles.

A treinta años de paz —como a otros treinta años de paz—,
más todo el acero y el cemento empleados en inventar la sombra de un país,
más a todos los discursos y los planes de negocios dulcemente empapados
por el olor de los desayunos en Sanborn’s,
se les rompió, de pronto, el espejo.
Se apostaron como siempre detrás de una iglesia,
poco importa si laica o religiosa,
y otras “Noches” y otras “Matanzas”,
vinieron en ayuda de ellos.

En la Plaza de las Tres Culturas,
el “Cacique gordo de Zempoala” y don Nuño de Guzmán y el anciano general perfectamente empolvado,
descubrieron que en realidad eran uno solo, porque secretamente siempre
desearon parecerse a Limantour.

Después de haber desayunado juntos en Sanborn’s,
el “Cacique gordo de Zempoala” y don Nuño de Guzmán y el anciano general perfectamente empolvado,
en la Plaza de las Tres Culturas, escucharon
—ya uno de los últimos conciertos—
el vals Dios nunca muere.



lunes, 2 de julio de 2012

Peña Nieto tú no eres mi presidente!


Llámenme terca, aferrada o como quieran pero estas elecciones fueron igual de fraudulentas que las anteriores y que las de hace 50 años, no hay democracia señores, ¡no la hay! independientemente de la compra de votos, de los carruseles, de la gente armada afuera de las casillas, robo de urnas, inflación de boletas, amenaza a representantes de casilla y demás acostumbradas y ya bien conocidas practicas del PRI, sì no fueran poco esta vez se valieron de los medios como nunca lo habían hecho. Hace más de 5 años un grupo decidió quien sería nuestro "Presidente".

Entonces empezamos a ver a Peña en televisa cortando un listoncito por aquí, inaugurando obras insignificantes por allá (eso si con la cobertura de alguien que hubiera descubierto la cura contra el cáncer), casualmente después se casa con la actriz más popular del momento (que ahora es nuestra primera dama) sabiendo lo mucho que disfrutan las novelas la gran mayoría de los mexicanos, sabiendo también que tenemos los peores lugares en educación.

 Nunca me toco escuchar en televisión los índices tan altos de feminicidios que tiene el estado de México después de que Peña gobernó, ni que en su administración incrementaron los indices de pobreza y marginación, nunca escuche que dijeran nada sobre las obras inconclusas que dejo y que varias de ellas ni siquiera salieron del presupuesto del gobierno sino de empresas extranjeras que seguirán cobrando años después, no dijeron nada sobre su relación con Montiel y Salinas, y no hablaron de eso porque les pagaron miles de millones de pesos para que dijeran maravillas de él , dinero que naturalmente pagaremos los mexicanos y eso señores se llama FRAUDE, FRAUDE, FRAUDE!!


 Escrito al momento y con todo el sentimiento a flor de piel, por eso está tan mal hecho.

jueves, 14 de junio de 2012

Gestación

Me abruma la calle porque en los espejos de los aparadores no me reflejo yo sino una parvada de gente con mirada triste; porque como un acto casi religioso aparecen niños debajo de las piedras melindreándole a la vida; señoras queriendo estirar los billetes “de a veinte” ; muchachitas en las esquinas con la humanidad en las costillas vendiéndose por pocos de pan;
perros flacos que no han conocido otra cosa más que sarna envuelta en garrapatas; hombres viejos y otros no tanto con los bolsillos llenos de agujeros y bolsitas de resistol; me abruma siempre volver a casa con nudos, que digo nudos tumores en la garganta, saberme tan insignificante no poder meterlos a vivir a todos en mi matriz protegerlos durante nueves siglos y darlos a luz hasta que el mundo se haya compuesto.

domingo, 29 de abril de 2012

Orinoco


La flor de lino


-Florido estaba el lino. Sus doce flores daban gracias al sol y a la lluvia, muy contentas con todo. Sus doce flores eran algo lindísimo. Y unas tijeras, de repente, vinieron haciendo un ruido horrible, cric, crac, cric, cruc, crac. Y decían: "se acabó, se acabó, se acabó". Y cortaron las doce flores y las echaron a un costal.


-Así es la vida, así es la vida exactamente.


-Pero decían las flores: "¿Se acabó? ¡No! Falta lo más hermoso todavía. Y las echaron al unos tanques, y las molieron pobrecitas, y las volvieron fibras. ¡Y las tejieron! Y luego fueron una tela preciosa, de varios metros, que estaba al sol tendida y la rociaban y la envolvían con mucho esmero. Y de repente, llegaron otra vez las tijeras, cortándolas en pedazos, cric, crac, cric, cruc, crac, se acabó, se acabó se acabó.


-Claro, si la vida es así, exactamente así.


Los pedazos decían: "No. Falta lo mas hermoso todavía" . Vino una aguja entonces, y los picó. Y traía un hilo atrás, por supuesto. Picó y picó y picó. ¡Y de pronto ya estaban doce camisas! Doce preciosas camisas de lino. Se las ponía un señor que las llevaba a fiestas, las manchaba de vino y cosas exquisitas. Y luego las lavaban y las tendían al sol y a la lluvia, al sol caliente y a la lluvia fresca...


Ahora fue el uso, Ahora fue el tiempo. Se fueron gastando, se luyeron, se rasgaron... Y en un costal se las llevo el ropavejero, y al echarlas al costal les decía: "se acabó, se acabó, se acabó".


Pero allá en el costal, ellas decían: "No. Falta lo mas hermoso todavía”.


Las llevaron a un gran tinaco. Las echaron allí, con otros trapos. Y las volvieron pulpas. Y la pulpa cayó en unos rodillos. ¡Y se volvió papel! Y allí salieron doce pliegos del más fino papel de lino, doce pliegos que se llevó un escritor, un poeta precioso que decía todo lo que es más bello y lo que es más cierto y lo que es más bueno, y lo decía muy bien. Allí lo dejó escrito, en los doce pliegos de lino. Que se fueron a las imprentas y los copiaron y los leyeron en el mundo. ¡Los doce pliegos eran famosos! Volvieron a su casa, siempre de tantas letras hermosísimas, pero también de... manchas de imprenta y de grasa... Se quedaron en un rincón honorable de la biblioteca...


Vinieron los ratones, y las polillas. Y dejaron el manuscrito que deba lástima. Y una noche hubo que echarlo al fuego. Y las llamas decían: "se acabó, se acabó, se acabó". Así es la vida, así es la vida exactamente.


Pero allí, sobre los carbones, quedaron doce chispas. Y subieron en un impulso de aire caliente, por el tubo tan negro y sucio de aquella chimenea, y salieron así a la noche, en torbellino, doce chispas rojas que dejaron atrás el humo y empezaron a confundirse con las estrellas. Y las doce decían: ¡no se ha acabado nada, falta lo más hermoso todavía!

Fragmento de la obra de teatro Orinoco, de Emilio Carballido


Siempre que necesito fortaleza lo leo, léanlo ustedes cuando sientan necesitarlo y muéstrenlo a aquellos que la estén pasando mal.

miércoles, 21 de marzo de 2012

La imparable Gaby Brimmer




Gabriela Brimmer poeta y activista nacida el 12 de septiembre en la ciudad de México. Es sin duda uno de los mejores ejemplos de lucha y pasión que existen no sólo en México sino en el mundo.

Gaby nació con Parálisis Cerebral lo que le impidió valerse físicamente por si misma durante toda su vida, la única parte que podía mover de su cuerpo era el pie izquierdo. Más esto no fue un limitante para realizar sus sueños: escribir, estudiar y ser madre. Estudio Sociología y Periodismo en la Universidad Autónoma de México (UNAM), escribió cuentos y poemas al por mayor, una autobiografía excelsa llena de poesía, de lucha y sensibilidad en la que su amiga Elena Poniatowska jugó un importante papel para su publicación. A la edad de 30 años adopto una niña. Fundó la Asociación para los Derechos de Personas con Alteraciones Motoras (ADEPAM) para asesorar, dar servicio médico,psicológico, fisioterapia, terapia ocupacional, alfabetización, Primaria y Secundaria en el sistema abierto de enseñanza psicológico y un sin fin de actividades culturales y recreativas para su desarrollo, por lo que se le considera una promotora incansable de los derechos humanos de las personas con capacidades diferentes. La presidente de dicha asociación fue su nana Florencia Sánchez Morales, su fiel amiga y compañera inseparable.



Brimmer es sin duda alguna una mujer digna de admiración y orgullo, quien no dejo de escribir hasta el último momento de su vida, de trabajar y promover los derechos y la igualdad de los discapacitados.

Aquí dos de sus poemas.

I
Me gustaría poder decir al final de mi vida,
que estuve agradecida de haber vivido
y luchado por una causa noble
como la libertad del hombre.
Yo que estoy encadenada a esta silla
yo que estoy presa dentro de un cuerpo
que no responde.
Haber amado al hijo y al amigo
y cantado canciones cuando se va la tarde.


II
Quiero morir en un día de invierno
gris, feo, frío,
para no tener la tentación de seguir viviendo.

Moriré en esa época del año,
porque de todo el mundo he recibido frío.

Quiero morir en invierno
para que los niños hagan sobre mi tumba
muñecos de nieve.


Gaby Brimmer



Esta es apenas una reseña brevísima de lo poco que yo sé sobre Brimmer, puesto que existen ya muchos trabajos que hablan de su vida y obra, con conocimiento y detalles, pues alcanzaron a conocerla o a hablar con Florencia su nana, por tanto cualquier cosa que yo pueda contarles sobre Gaby, ya esta dicho. Sin embargo no quise dejar pasar esta oportunidad de contarles sobre ella en el día mundial de la poesía.

miércoles, 29 de febrero de 2012

Un poema de Fernando Paredes

Cuando me veas barbón
y usando suéter cachemir
no te acerques
no digas nada

... ando mal

traigo caspa en los ojos
lagañas en las manos
mocos en la boca
escurrimientos en el corazón

Entonces soy el cerebro
cansado de pensar

El alma inservible
del viejo transistor

El perro abandonado
por la niña de labios rojos

Y soy también
todo lo idiota que puedas imaginar.

Cuando me veas caminando
y hablándole a la calle
no te acerques
no me llames

ando mal

Se me ocurre matar
a la señora del peinado raro

al estudiante de zapatos blancos

a la muchacha que ríe y ríe y ríe

Se me antoja morir

a las cinco de la tarde

a las diez de la mañana

el lunes el martes el miércoles

y los días de guardar

Se me olvida tu nombre
tu cara
Se me olvida lo que te dije ayer
cuando te quería

Cuando me veas sentado
enfrente de tu casa
llama a la policía
Saca el cuchillo cebollero
Y vigila tras la cortina

Ando mal
y estoy pensando
en subirme a tu cuerpo
morder tu cabello
lamerte las manos
chuparte la boca
romperte el vestido
y quedarme pegado a ti
así
todo el día

Llama a los vecinos
Al presidente de colonia
Al diputado Barraza
A los ángeles azules
A san Benito
A san Cuauhtémoc
A san Nicolás

Llama al imbécil ese que tanto te gusta

Ando mal
y estoy pensando.

Cuando me veas leyendo
un libro de forros desgastados
huye despavorida:

un cadáver exquisito
me está enseñando
a odiar al mundo
con minucia selectiva

Me está diciendo
que todo se repite

una y otra vez
una y otra vez
una dos tres

Me está poniendo en la cabeza
pájaros moribundos
asteroides destrozados
kilos de ceniza
chapopote burbujeante
y gordas cucharadas
de inanición

Entonces soy todos los defectos de la Historia

La garantía vencida el mes pasado

El agujero a donde se te fue la risa

El cumpleaños en que nadie tocó a tu puerta

La sensación
de no estar haciendo
algo bueno
con la vida

Soy algo informe
que te informa
de lo que nunca te querías enterar...

Pero si un día me ves esperando
a que pase un taxi
cerca de la madrugada
y respondo a tu saludo

detente
abre la puerta
invítame a subir
llévame a casa
y platícame sin prisas
cómo es que te va
Pasaremos un buen rato
recordando aquella vez en que…



Tomado del Libro
Al Diablo Adentro


¡Me enamore de este poema caray!

domingo, 26 de febrero de 2012

La triste jaula de los humanos.

Hoy mientras caminaba se atravesó frente a mí un carro anunciando circo, atrás llevaba una jaula con una llama que me miro a los ojos y de arriba abajo, analizando toda mi persona. Seguido de esto aventó con su hocico unos pocos de paja. Al llegar al circo habló con todos los demás animales y contó su buena acción del día: Hoy alimente una pobre humano enjaulada en el infierno al que ellos llaman tierra.

lunes, 20 de febrero de 2012

Reservando para hibernar

Si paso cada momento diciéndote “Oye Manuel”, señalando mi mejilla para que la beses, picándote la pansa, haciéndote ts ts para que voltees, es porque quiero llenarme de reservas para estos días de profunda soledad, donde me faltan todo el tiempo tus brazos fuertes que me cuidan de los carros imprudentes que no se dan cuenta que voy a pasar. Faltan las siestas, tus besos de lunar.

No están tus palabras terminando oraciones que apenas voy a pensar, no hay debates después de una nota, mucho menos de una película, no hay pelea de libros, tampoco me dan ataques de risa de 15 minutos y por tanto no las puedes grabar en tu iPad, no está tu voz de amor de mi vida haciéndome volar.

Me lleno de ti hasta no hastiarme, porque aquí no hay café recién preparado al despertar, no hay ceibas ni emociones porque ya vas a llegar. No existen lugares por descubrir una tarde cualquiera donde nos demos cuenta que tocan jazz, no hay horchatas de la catedral, no esta Rox para platicar, Dan asustándome a cualquier oportunidad, ni las sobremesas con tus papás. No hay nadie que me ruede, gestos chistosos, jueves de Army, no hay Plex ni bardas del vicio, cervezas con Lino, reuniónes de palapas, no hay 8 playeras de la cruz roja, no hay Fabiola de verdad.

Es insípida la vida aquí en Ocotlán, la ciudad no tiene la culpa, la tiene el tiempo y la ubicuidad que no te permiten estar aquí y allá.

miércoles, 15 de febrero de 2012

Periodismo de investigación en tiempos de “transparencia”

Periodismo de investigación en tiempos de “transparencia”

Si mañana despertara con la noticia, de que mi compañera de cuarto Ana, gritó durante toda la noche “Soy la reina de España” mientras dormía y ella considera esa información confidencial, podría demandarme y yo quedaría encerrada en prisión de 1 a 5 años, además de pagar una multa que va de cien a mil días de salario mínimo. Así actuara la nueva ley de transparencia en Jalisco, la misma que entra en vigor el día primero de Abril del presente año.

Si acaso empezábamos a ver destellos luminosos y constantes de buen periodismo de Investigación en Jalisco, estos tendrán que ser escondidos o iniciar un éxodo a algún lugar donde pueden brillar sin temor a ser vistos, para posteriormente ser castigados.

Y es que, si bien para muchos hacedores de la noticia es difícil profundizar en temas de actualidad, no por escasez de interés, sino por la sed de primicia, el sueldo paupérrimo, horarios desgastadores, impuestos por el medio en el que se trabaja; con la Ley de transparencia en vigor, tendrán no sólo que luchar a capa y espada para que su trabajo sea aprobado en la edición, sino también contra el poder judicial, que raras veces cede.

Los periodistas no han tardado en manifestar su descontento. En redes sociales podemos ver afirmaciones como “En tiempos del escándalo del Watergarte, Richard Nixon todavía sería presidente, los periodistas Bernstein y Woodward estarían presos, y el agente federal "garganta profunda" que les dio la información sería un criminal.”

No se pretende victimizar a los informadores, es verdad que también hay muchos pseudoperiodistas metiéndose en la vida privada de sus blancos e inmiscuyéndose en la intimidad de quienes son actores de la vida pública. Sin embargo sabemos que esta Ley no va precisamente dirigida hacia ellos. Está claro que los que gobiernan han sentido descontento e irritación al ver sus movimientos y estrategias publicadas y exhibidas a la sociedad, sin tapujos ni maquillaje.

Esta nueva Ley, a la que la profesión periodística se verá sometida, habla de un gobierno intolerante a la crítica y al escrutinio, de un gobierno irrespetuoso con el derecho de los ciudadanos a ser informados, autoritario y sordo ante las necesidades de una sociedad cada vez más voraz, con sed de verdad.

El periodismo de investigación está en su mejor momento: libros sobre la temática, conferencias, ponencias y debates en relación a esta forma de ejercer la profesión están siendo muy bien recibidas por toda la comunidad periodística. Puede verse el entusiasmo y las ganas de hacer una verdadera radiografía de los acontecimientos, pero aquí mi pregunta es ¿Puede hacerse un verdadero periodismo de investigación, exhaustivo y preciso incluso yendo en contra de la ley? ¿Cómo sobrellevaran esta ley los que apenas están empezando, los periodistas recién salidos, los que no tienen influencias, esos a los que no les importe nada más que mostrar la verdad? Habrá que esperar ver como se llenan las celdas a partir del primero de Abril.

lunes, 13 de febrero de 2012

ATRAPADA EN LA RED.

Esta crónica la hice a principios de Diciembre y surgió a partir de una serie de entrevistas a "Telly" y familiares cercanos, respecto a su adicción a las redes sociales.


Telly es una chica de 21 años, estudiante universitaria en la ciudad de Guadalajara. Su nombre no es real, pide que lo cambie. Es delgada, tiene cara ovalada, cabello lacio muy negro y unos ojos color avellana combinado con leves toques de rojo, los cuales talla con frecuencia.

"¿Qué quieres que te cuente? Hace tiempo que no duermo bien y que no disfruto estar fuera de mi casa, sea lo que sea que tenga que hacer. No pongo mucha atención en clase y hago a la carrera todas mis tareas. Sí, es porque tengo prendido el ordenador más de 17 horas al día, desde que me levanto hasta que se me cierran los ojos del sueño”.

Como Telly el 49% por ciento de la población mexicana con acceso a internet se encuentra conectado a su computador durante todo el día, según revela la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI).

La chica saca su celular del bolso, lo revisa, luego lo guarda, vuelve a sacarlo, guardarlo muchas veces más. Se disculpa con un "lo siento sólo miraba la hora"
Se queda pensativa, "y mis notificaciones de Facebook”, sus mejillas se sonrojan y exclama con rapidez, “no puedo dejar de mirarlo, me pasa lo mismo en las salidas con amigos y reuniones familiares, no les presto mucha atención, lo peor es cuando están a lado mío y les mando pin por celular (SIC) o les escribo en su muro, pero esto no sólo me pasa a mí, ya últimamente todos mis amigos son así también, podemos estar en el mismo lugar y nos escribimos cosas en nuestras fotos, nos mandamos videos o cosas chistosas”.

México es el país de América latina con más usuarios en Facebook, cuenta con 12.5 millones. Un reciente estudio realizado por SMLatam señala que la cifra de los usuarios mexicanos se mantiene en contaste crecimiento y que 51% son mujeres.

Todas las noches sucede lo mismo, se acuesta después de pasar horas frente a su lap top y se maldice por haber perdido tanto tiempo navegando en internet, jugando, chateando con gente desconocida o inventándose una personalidad distinta.

Se mete a la cama y piensa que el día siguiente será distinto, cierra los ojos y se ve haciendo sus tareas en tiempo y forma, comiendo en los horarios adecuados y prestando atención en clases. No deja de revisar sus páginas estando en la escuela ya sea mediante su teléfono o por su computadora.
Investigadores norteamericanos, empiezan a referirse al fenómeno como desorden o trastorno de adicción a Internet (IAD por sus siglas en Inglés), uso excesivo o compulsivo de Internet, o uso patológico de Internet. Esta adicción llega cuando el uso excesivo empieza a interferir en la vida cotidiana de quien la padece y el navegar en internet ya no es satisfactorio, comienzan a experimentar ansiedad si no se lleva a cabo.

Su hermana Andrea, quien concede una entrevista vía Skype menciona que Telly antes tenía excelentes calificaciones y estas han bajado. Antes salían a correr juntas o se acompañaban a clases de baile. Hoy sólo la ve en su ordenador más no dormir ni hacer otras actividades, “cuando le digo que ya tengo sueño ella se va al estudio o a la sala, más de una vez me ha tocado levantarme ya para irme a la escuela y verla todavía despierta frente a su máquina. Me da mucha desesperación, he intentado hablar con ella pero ya no escucha, es como si viviera en otro mundo”. Andrea dice que sus papás también están preocupados, la ven pálida, distraída e irritable.

Telly no puede lograr ni las pequeñas metas que planea durante el día: “A veces digo, hoy si acabaré todas mis tareas pendientes, comienzo a hacerlas, pero me distraigo con cualquier cosa, chateo en Messenger con compañeros de la universidad que vi durante todo el día o me la paso viendo fotos y publicaciones en el Facebook, ¡llego a ver el álbum entero de fotos de personas que ni me interesan! Cuando me doy cuenta ya son las 2 o 3 de la mañana y nuevamente no hice nada. Siempre me dan ganas de llorar”.

Según un estudio realizado por la Universidad Iberoamericana (UIA) titulado “La Adicción a Facebook Relacionada con la Baja Autoestima, la Depresión y la Falta de Habilidades Sociales”, la mayor parte de los jóvenes adictos a Facebook y demás redes sociales tienen una historia de disfunción familiar. También detectaron tendencias al aislamiento social, patrones de evasión de la realidad y
predisposición a la depresión, inestabilidad emocional, pobre tolerancia a la frustración, volubilidad e irritabilidad.

Telly ya no realiza ninguna actividad fuera de casa más que las necesarias. Los fines de semana también se queda encerrada, ve películas en línea pero no con en el modo de pantalla completa, para poder ver si le escriben en Facebook o en el chat.

Todos los días come frente a su ordenador, salvo cuando sus papás la obligan a hacerlo en la mesa con ellos y su hermana. También la obligan a dejar el celular en el cuarto mientras dura el tiempo de la comida y por esa razón no la disfruta, mastica con rapidez y piensa, ¿qué me habrán escrito en mi muro?, ¿me habrá hablado alguien en Messenger?.

Este mismo estudio realizado por la UIA demuestra que otro elemento de gran importancia es la fobia de ansiedad, puesto que adolescentes que la padecen no les gusta salir y el Internet les da la posibilidad de contactarse con otros e involucrarse en juegos sin la necesidad de exponerse a situaciones que les causen angustia.

La chica traga saliva y dice: “te voy a ser honesta, a veces hasta pienso que sería mejor no vivir. Me pongo a imaginar, ¿qué va a ser de mí si sigo llevando este ritmo de vida, si me la paso pegada a mi computadora?"

Dice que solía ser una excelente alumna, hacía muy buenas tareas y los maestros la felicitaban por ello. Ahora hace todo por cumplir, al “ahí se va”. Miente respecto al tiempo que pasa frente al ordenador, inventa salidas y tareas. “Cuando hago eso me odio por dentro y quisiera que me atropellará un carro o sufrir un accidente. Sé que suena estúpido, pero eso siento, porque tampoco me atrevería a suicidarme, es que ya no sé qué hacer para salir de este círculo vicioso. He buscado en la misma red a ver si encuentro un grupo de apoyo para adictos a internet y no hay nada, sólo hay para drogas, alcohol, neurosis y esas cosas, ojalá hubiera uno, sé que habría muchos como yo”.